Recibimos fuerza del Resucitado, de sentirnos en comunión como Iglesia y vivir este tiempo con la certeza de que el dolor y la muerte no tienen la última palabra.
La Institución Teresiana quiere hoy transmitir una palabra de ánimo. Como decía la beata Victoria Díez: “Ánimo, que la vida puede más”. Sí, ánimo que el amor y la solidaridad pueden más.